En una muestra de esfuerzo colectivo y compromiso con el desarrollo local, un grupo de vecinos y prestadores turísticos de Fiambalá decidió tomar la iniciativa para garantizar la llegada de visitantes a uno de los principales atractivos de la región: las Termas Los Hornos.
El camino que conecta a este paraíso cordillerano, situado a 3.000 metros sobre el nivel del mar, había quedado prácticamente intransitable tras las intensas lluvias del verano. La falta de mantenimiento y las demoras en la respuesta de las autoridades amenazaban con aislar a este sitio clave para la economía turística de la zona.
Frente a esta situación, la comunidad local se organizó a través de un grupo de WhatsApp y puso manos a la obra. Con camionetas 4×4, herramientas, combustible y comida, en una jornada solidaria trabajaron “a pulmón” para reparar los sectores más dañados del camino. Un total de 18 personas, entre prestadores y un delegado municipal, se enfocaron en un tramo de 8 kilómetros que presentaba los mayores desperfectos.
La tarea no fue sencilla, ya que implicó remover piedras, nivelar sectores erosionados y reforzar zonas de derrumbe. Sin embargo, el esfuerzo conjunto permitió devolver la transitabilidad y restablecer el acceso a las termas.
Hoy, gracias a esta acción comunitaria, Los Hornos vuelve a estar disponible para los turistas que buscan relajarse en sus aguas termales, rodeadas de un paisaje imponente de montaña.
Este gesto solidario no solo representa la recuperación de un atractivo turístico, sino también un ejemplo de organización y compromiso ciudadano para defender las fuentes de trabajo vinculadas al turismo.
